La definición de políticas concretas para la ruralidad, con miras a potenciar su desarrollo y proteger el entorno, es el principal objetivo de la elaboración de un Plan de Desarrollo Rural, impulsado por la Municipalidad de Quilpué. La iniciativa contempla trabajo en terreno con la comunidad, recogiendo sus inquietudes, proyectos y visiones de lo que se quiere para el sector.
El alcalde Mauricio Viñambres explicó que esta idea nació en el marco de la confección del Plan de Desarrollo Comunal (PLADECO), donde se detectó la necesidad de establecer una suerte de “carta de navegación” para el trabajo en las zonas rurales de la comuna.
“La ruralidad, hasta entonces, era vista sólo desde la perspectiva de Colliguay, dejando de lado el Valle de Marga-Marga. Por ello se planteó hacer un plan de desarrollo específico de la ruralidad, que incluyera un diagnóstico de lo que existe, lo que podemos potenciar y desarrollar desde toda esta zona”, indicó Viñambres.
Para este efecto, ya se está trabajando en la elaboración de un catastro que incluye datos sobre temáticas como son: población, productividad, educación, salud, cultura y patrimonio, entre otras.
Participación de la comunidad
Paralelamente, el Municipio ha convocado a reuniones con los habitantes de cada sector, dado que uno de los aspectos esenciales de este Plan de Desarrollo Rural es respetar la visión que tiene la comunidad tanto del Valle de Marga-Marga y Lo Orozco como de Colliguay.
“La idea es fortalecer lo que se ha ido haciendo en los últimos 6 años, en que se ha hecho un énfasis en esta zona, y definir un lineamiento de trabajo para los próximos 10 o 20 años. En el fondo, se trata de fijar una identidad de ruralidad en la zona de Marga-Marga y Colliguay, dando los énfasis especiales que se quiere hacer en conjunto con las personas que habitan”, detalló el alcalde Viñambres.
“Se ha trabajado sobre la base de una estructura de reuniones en las distintas localidades, con los vecinos de cada sector, donde ellos han manifestado sus inquietudes, sus miradas, su visiones. Queremos conservar la zona con las características que tiene actualmente y que sean consideradas y pensadas, potenciando sus cualidades fundamentales, sin perder las características propias de la ruralidad”, acotó.
Plan estratégico
De tal manera, teniendo identificadas las potencialidades, se quiere desarrollar un plan estratégico para estas zonas, abordando temáticas ya más específicas, como es la protección de patrimonio, la integración de una educación rural, la promoción del turismo, etc.
En este contexto, uno de los proyectos que desataca es la construcción de una feria de artesanía chilena, generando así un polo de promoción turística, que fortalezca el trabajo que realizan los restaurantes y centros recreativos.