La independencia, las ganas de adquirir nuevos conocimientos y poseer un trabajo que la
mantuviera cerca de sus hijos, fueron las principales motivaciones que tuvo Eliana Robles
para comenzar su propio negocio.
La emprendedora tiene una historia de vida como la de muchas otras mujeres de nuestro
país. Es separada hace diez años y tiene tres hijos, a quienes ama y sobreprotege por
encima de cualquier cosa. Entró al Banco Comunal (BC) “Chocota Emprende” de Ventanas,
V región, con el objetivo de hacer crecer su pequeño emprendimiento y desde hace cuatro
años ha logrado posicionarse como una de las mejores banqueteras de la zona.
Este año, Eliana se convirtió en embajadora de Fondo Esperanza (FE), comunidad de
emprendimiento solidario más grande de Chile, ya que es parte del patrimonio vivo de la
institución social y un ejemplo de trabajo y esfuerzo que busca ser adoptado por todas las
personas que decidan potenciar su negocio independiente.
Emocionada, comenta que Fondo Esperanza (FE) le entregó la confianza para salir
adelante cuando más lo necesitó, por lo que siente que tiene el deber de devolver la mano
entregando trabajo a personas que lo necesiten tanto como ella lo requirió alguna vez.
“Unas amigas me invitaron a ser parte de la institución y acepté. Soy banquetera, pero
antes de eso fui peluquera y confeccionista. Me siento tan agradecida, porque Fondo
Esperanza me hizo sentir útil en la sociedad, por lo mismo, ahora tengo a otras personas
trabajando conmigo para brindarles las mismas oportunidades que yo tuve”, explica.
Eliana realiza cócteles, almuerzos y cenas con variados menús según los requerimientos
de sus clientes. Además, ofrece servicio de tintorería y decoración de salones para
eventos. Dice que es autodidacta, pues es ella quien confecciona los adornos y manteles
para sus presentaciones banqueteras.
Se define como una madre preocupada y sobreprotectora, por lo que a la hora de buscar
un emprendimiento, eligió uno que le permitiera estar cerca de su familia para poder
pasar tiempos libres con sus hijos. Asimismo, se describe como una mujer independiente,
feminista y, ante todo, solidaria, que no le teme a los nuevos conocimientos. Es por esto
que sigue perfeccionándose tomando diversos cursos en institutos profesionales.
Al consultarle sobre su vasta experiencia en Fondo Esperanza, Eliana indica: “Sin la
institución habrían muchas cosas que no hubiese logrado. Tenemos esa confianza que nos
entregan de manera desinteresada, además de los microcréditos y la gran amistad que
generamos entre todos los que conformamos el Banco Comunal. Encantada invitaría a la
gente emprendedora a ser parte de la organización. Yo sé que es difícil a veces creerse el
cuento como pequeña pyme, pero es increíble cómo vas viendo tu progreso y tus
aprendizajes. Ahora entro a mi bodega y me emociono porque la veo llena de cosas por
ofrecer a mis clientes. Es una bendición que Fondo Esperanza le haya puesto alas a mi
emprendimiento”, finalizó.
Fondo Esperanza
FE es una institución de desarrollo social con 13 años de trayectoria que tiene como
objetivo apoyar el sueño de mujeres y hombres emprendedores de sectores vulnerables,
mediante servicios microfinancieros, capacitación y redes de apoyo. Cuenta con 53
oficinas que cubren alrededor de 240 comunas en todo el país.