Por razones de seguridad y orden, la feria comercial que acompaña al desarrollo de la fiesta religiosa de Nuestra Señora de las 40 horas de Limache, que se realiza el último fin de semana de febrero, se trasladará desde las inmediaciones de la Iglesia La Matriz de la Santa Cruz (Santuario de las 40 horas) hasta las rectas del Ala Oeste y Sur de la pista de Motos del estadio Ángel Navarrete Candia de Limache.
Así lo dispuso el alcalde de Limache Luis Minardi de la Torre, tras la sesión del Concejo Municipal de este miércoles 19 de enero, donde tres ediles votaron apoyar la medida y otros tres, se abstuvieron. Ello porque el sector donde tradicionalmente se instalaba la feria, en el perímetro de las calles Echaurren, República y Molina (aledaños al santuario de las 40 horas) causaba serios trastornos a quienes residen en el sector, considerando además los riesgos que pueden ocasionarse producto de la gran concentración de personas en el lugar, sumado a la inexistencia de normas de higiene y seguridad, a consecuencia de la falta de agua y baños químicos.
El alcalde Minardi reafirmó que con esta medida se está velando no sólo por la seguridad de los feligreses, sino también por la de los comerciantes, ya que el lugar donde se piensa reubicar la feria (Pista de motos del estadio Ángel Navarrete), cumple a cabalidad con las condiciones de higiene y seguridad, pudiendo responder mejor todos los servicios que se dan cita en esta fiesta, en caso de alguna emergencia. “Privilegiamos la seguridad de los feriantes y asistentes a la feria, permitiéndose un acceso adecuado y manejar mejor cualquier situación de riesgo en caso que se produzca”, expresó la máxima autoridad comunal.
La Fiesta religiosa de la Virgen de las 40 horas se realiza el último fin de semana de febrero. Tradicionalmente, junto con la gran cantidad de feligreses que llega a honrar a la Virgen María, concurren comerciantes de todo el país a ofertar sus productos, tal como ocurre en la mayoría de las fiestas marianas que se desarrollan a lo largo del país.
Este año se pretende cerca de 500 puestos de 3×3 metros cada uno. Se dispondrán dos grandes zonas de concentración de público y comerciantes. Co el traslado de la feria se reduce a cero un inminente peligro de aplastamiento, ya que los comerciantes no quedarán instalados cerca de paredes. Contarán además con agua potable en el lugar y servicios higiénicos