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Por:Claudia Rodríguez T.
Directora y fundadora de No Chat
Presidenta del COSOC de la Subtrans.

El mes de abril comenzó con dificultades y terminó peor en cuanto a la seguridad vial y el incumplimiento de las normas de tránsito, especialmente la Ley No Chat. Precisamente esta normativa se diseñó para garantizar la seguridad de las personas que se desplazan por la ciudad, instando a evitar distracciones al conducir.

Solemos recibir denuncias sobre el incumplimiento de esta ley a través de las redes sociales, especialmente de personas que trabajan como influencers y que comparten con su comunidad videos y grabaciones de ellos mismos mientras conducen. Esto normaliza una acción que lamentablemente genera muertes en el tránsito.

Publicamos la primera denuncia el 10 de abril, implicando al influencer Hedley Foos, quien tiene más de 1 millón de seguidores en todas sus plataformas. Foos decidió grabarse mientras conducía durante más de 1 minuto en carretera, con el propósito de mostrar a su comunidad cómo llegar a un restaurante que estaba promocionando.

El 15 de abril, cinco días después, recibimos una foto-denuncia de un operador de Red Movilidad que manipulaba su teléfono e incluso hablaba durante varios minutos mientras transportaba a decenas de pasajeros por la avenida Los Leones, en la comuna de Providencia. No olvidemos que los conductores profesionales tienen una doble responsabilidad, ya que de ellos depende la vida de muchas personas en cada traslado.

En los últimos días, hemos vuelto a denunciar la conducta del jugador de Colo Colo, Arturo Vidal. Este deportista, quien suele compartir contenido en sus redes sociales, se graba frecuentemente mientras conduce para promocionar las marcas de sus autos. Lamentablemente, ha hecho esto en varias ocasiones, y ha contado con el silencio cómplice del club y de sus patrocinadores.

La última denuncia provocó reacciones fuertes entre los seguidores de Arturo Vidal, quienes nos recriminaron en redes sociales e incluso nos tildaron de exagerados. Sin embargo, el pasado 18 de abril, un niño de 3 años murió en un siniestro de tránsito ocurrido en la comuna de Maipú, cuando uno de los conductores implicados perdió el control del vehículo al manipular su teléfono, que se le había caído al suelo del auto momentos antes.

Esto va más allá de preferencias deportivas, seguidores de influencers o lealtades a marcas. Se trata de vidas en juego, de personas que mueren o quedan con lesiones graves debido a la irresponsabilidad de quienes optan por ignorar las normas de tránsito, como la Ley No Chat en este caso. Reconocemos que la fiscalización es un reto, pero incluso un gran número de policías o inspectores no logrará reducir las cifras si la ciudadanía no coopera. Continuaremos denunciando, porque nos rebelamos a la idea de que una historia en Instagram o un video de TikTok sean considerados más importante que una vida.

Las opiniones vertidas en esta columna,son de exclusiva responsabilidad de quien las emite,y no mecesariamente,representan el pensamiento de Marga Marga Online.