Por :Camila Flores.

Estamos llenos de autoridades inexpertas que no saben actuar, que no tienen experiencia técnica para los cargos que están ocupando. En este caso, aún peor, ni siquiera teníamos un titular. Y la verdad es que si hubiese habido un titular probablemente más bien obedecía ese nombramiento a características políticas más que técnicas y de competencia. En el Gobierno vemos a personas que realmente no están capacitadas para gobernar. Y frente a esta situación, a su inexperiencia, a su incapacidad, es que ocurren tragedias tan grandes como las que vivimos en la Región de Valparaíso, donde incluso los municipios de su propia coalición de gobierno tampoco han sabido actuar de la manera correcta y no han estado a la altura de las circunstancias. Por eso es que la mayoría de las encuestas de opinión de la región dan cuenta de que la gente desaprueba cómo el gobierno y las autoridades locales, tanto regionales como comunales, han manejado esta emergencia, porque son personas que no saben lo que tienen que hacer, no tienen idea cómo reaccionar, porque toda su vida más bien se han dedicado al activismo político en vez de realmente trabajar en la administración pública.

Las expresiones vertidas en esta columna de opinión,son de exclusiva responsabilidad de quien las emite,y no necesariamente,representan,el pensamiento de Marga Marga Online.

Por:Claudia Rodríguez T.

En las últimas semanas, hemos presenciado diversas acciones irresponsables y temerarias de reconocidas personalidades nacionales. Desde influenciadores hasta deportistas y figuras políticas, durante el mes de febrero fuimos testigos de conductas que ponen en peligro la seguridad de todos los usuarios y que no debemos tolerar.

Primero fue la ex alcaldesa Cathy Barriga, quien antes de enfrentar a la justicia por corrupción durante su gobierno en la municipalidad de Maipú, se dedicó en reiteradas oportunidades a grabarse cantando mientras conducía su vehículo.

Semanas después, la influencer Nayadeth Neculhueque subió una publicación a sus redes sociales donde se grababa durante largos minutos mientras manejaba su auto, entregando recomendaciones y contando su día a día a sus seguidores durante un traslado a alta velocidad.

En el caso más reciente, el piloto de rally chileno Felipe Padilla protagonizó una muestra extrema de irresponsabilidad al acelerar su automóvil hasta alcanzar los 231 kilómetros por hora mientras transitaba por el puente Llacolén en Concepción. En un acto aún más peligroso, sacó su teléfono para grabar esta temeraria acción, aumentando considerablemente los riesgos de causar un siniestro de tránsito y poner en peligro la vida de personas inocentes que transitaban por el lugar.

Esta lamentable tendencia se repite con frecuencia, con actores, animadores de televisión y diversas celebridades normalizando conductas peligrosas que, en última instancia, resultan en tragedias y lesiones en el tránsito. Incluso algunos canales de televisión muestran despachos o entrevistas donde se observa a personas manipulando pantallas mientras conducen, violando flagrantemente la Ley No Chat. Esta situación es totalmente inaceptable y exige una acción inmediata para concientizar sobre los riesgos y garantizar la seguridad vial.

Es cierto que la fiscalización de las normas de tránsito representa un desafío, dado el limitado personal disponible para esta labor. En este escenario, nosotros, como ciudadanía, tenemos la responsabilidad de repudiar estas conductas, denunciarlas y exigir a los medios de comunicación que no normalicen comportamientos irresponsables. También es crucial llamar la atención de las marcas que respaldan a estas figuras públicas, instándolas a no tolerar conductas de riesgo. De esta manera, podemos contribuir activamente a crear conciencia y promover un cambio en la actitud hacia la seguridad vial.

Con la llegada inminente de marzo, nos enfrentamos al retorno a la rutina, la congestión y todos los desafíos que este mes conlleva. Este escenario nos insta a ser más responsables que nunca durante nuestros desplazamientos. No olvidar que la tolerancia y empatía son claves para alcanzar la convivencia vial.

Directora y fundadora de No Chat
Presidenta del COSOC de la Subtrans.

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por:Percy Marín

La autoridad regional se sumó a la petición de los gremios de salud, quienes advirtieron
que perder este centro asistencial va a generar consecuencias negativas para los pacientes
y trabajadores del recinto.
Por medio de una carta el actual gerente del histórico Hospital de Niños y Cunas en Viña
Del Mar, dio a conocer la compleja situación en la que se encuentra la institución, debido a
los diversos acontecimientos que ha enfrentado el país, tales como la pandemia, el 18 de
octubre de 2019 y la quiebra de la Isapre Más Vida, lo que sumado a la disminución de
donativos ha obligado al centro médico a poner fin a los servicios del hospital y de atención
de pacientes.
En este contexto el consejero regional, Percy Marín, sostuvo que “la Región de
Valparaíso no se puede permitir perder este recinto médico, que tiene años de historia y
que ha sido un importante aporte para la salud de pacientes pediátricos y adultos en la
región, así como también es un lugar que da trabajo a muchas personas”.
En la misma línea, el core y presidente de la Comisión de Inversiones, planteó que “es
fundamental que las autoridades del Minsal analicen alguna medida para asegurar la
continuidad de este hospital. No puede ser que dependan de la caridad para funcionar, acá
tenemos que relevar la historia de este centro y tomar cartas en el asunto para evitar su
cierre definitivo, lo que sería algo perjudicial para el ya alicaído sistema de salud en la
región”.
Cabe mencionar que el Hospital de Niños y Cunas cuenta con diversas especialidades en
pediatría, cirugías de adultos y pediátricas, medicina general, nutrición, entre otras
prestaciones disponibles para la ciudadanía.

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